lunes, 4 de noviembre de 2013

EL JARDIN DE MI ABUELITA

Una tarde me senté en el jardín de mi abuelita,
y vi como las hormigas iban y venían. Quise saber
que era lo que hacían y así empece a seguirlas;
 vi donde tenían su casa.
Ellas cargaban pedacitos de hojas que llevaban
a su cueva.
¡una de las hormigas me quedo mirando!
entonces le pregunté:
_ ¿No te da lástima quitarle las hojas a los árboles ?
La hormiga se puso muy triste y me dijo:
_ es que tenemos que comer igual que tu para vivir.


Entonces entendí porque se llevaban las hojas.
El árbol de pino que me veía, mientras se reía,
me dijo:
_¿ Sabes?  todos tenemos que ayudar y yo
a las hormigas tengo que alimentar .
Las rosas que  me miraban me dijeron:
Nosotras también ayudamos a que el jardín se
vea mas bello.
La zabila que escuchaba todo lo que se hablaba
cuando pase a su lado, sin pensarlo me pinchó
y cuando la vi me preguntó:
_¿ Que? ¿ a mi nada me vas a decir?.
Entonces le sonreí , pase una tarde feliz y después
que de todas me despedí, me dijeron que se sentían
muy bien de que las visitara y las quisiera también.




SI TODOS NOS AYUDAMOS SEREMOS MAS FELICES.
DANDO SIEMPRE RECIBIRÁS MAS .